Ante el panorama tan incierto que vivimos en la actualidad y la inseguridad laboral que nos dejó la pandemia, desarrollar un sentido de pertenencia que garantice el bienestar de los colaboradores hoy, más que nunca, es vital para alcanzar el éxito tanto de los empleados como de las empresas. Pero, ¿qué significa realmente tener un sentido de pertenencia en el trabajo y por qué es tan importante?
El sentido de pertenencia se refiere a la sensación real y profunda de los colaboradores de formar parte de una empresa en la que se sienten valorados, respetados y como un miembro indispensable del equipo. Es algo que está directamente relacionado con la diversidad e inclusión.
El factor clave para lograr esta sensación de pertenencia es que, tanto la firma como los compañeros, acepten y celebren la singularidad e individualidad de cada uno de los empleados, es decir, que se valoren las distintas características de la identidad de cada uno de los colaboradores como el estado civil, la etnia, la orientación sexual, la nacionalidad, etc... Esto permite crear una importante conexión que, además de brindarles satisfacción personal, también les impulsa a esforzarse más por cumplir los objetivos de la empresa.
A pesar de que pareciera que la cultura de pertenencia es intangible, hay diferentes estudios que demuestran el impacto positivo que tiene para las organizaciones: BetterUp demostró que el sentido de pertenencia al lugar de trabajo incrementa el rendimiento laboral de los empleados en un 56%, disminuye la rotación en un 50% y reduce las bajas por enfermedad en un 75%. Por otro lado, una investigación realizada por Great Place to Work revela que los colaboradores se vuelven cinco veces más propensos a querer permanecer en su organización a largo plazo, puesto que la ausencia de sentido de pertenencia es una de las tres razones principales que dan los empleados a la hora de renunciar.
Cuando las personas se sienten vistas y apreciadas en sus espacios de trabajo se incrementa su motivación, su compromiso y su rendimiento, teniendo como resultado empresas más productivas, con culturas organizacionales sólidas, con empleados satisfechos en un espacio que busca su bienestar y, por ende, con menor rotación de personal.
Hay diferentes acciones que se pueden realizar para fomentar el sentido de pertenencia en las organizaciones:
Crear políticas inclusivas y diversas y asegurando su aplicación. La clave está en fomentar la integración en todos los niveles.
Tener líderes que trabajen con empatía, humildad y apertura, que reconozcan la diversidad y abran canales de comunicación activa, transparente y segura.
Reconocer de manera frecuente el trabajo de los colaboradores.
Ofrecer oportunidades de crecimiento y desarrollo para los empleados,
demostrando la apuesta por su futuro.
Fomentar el trabajo en equipo y la colaboración entre los miembros.
No se trata de crear una estrategia compleja y con difícil aplicación: es con las acciones cotidianas y constantes como se alcanzará este objetivo.
El poder de la pertenencia es enorme, y no sólo beneficia a los colaboradores, sino que es crucial para el éxito de los negocios. Las empresas que lo priorizan y lo trabajan a través de comunicación abierta, reconocimiento, inclusión, desarrollo profesional y trabajo en equipo suelen atraer mejor talento, llevar a una mayor productividad y a una cultura organizacional positiva, o bien obtener mejores resultados alcanzando el éxito de cada miembro y el de la organización. En un mundo laboral cada vez más competitivo, invertir en el sentido de pertenencia es invertir en el futuro de la empresa.
Itziar Olóriz, CEO de Itz Coaching
Fuentes: Great Place to Work, BetterUp, Telefónica
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